Una experiencia que te acercará al mundo vinícola desde una perspectiva diferente con un único objetivo: conocer y gozar de una de las riquezas naturales de nuestro territorio.

Iniciamos la visita a la era de los olivos, donde les daremos la bienvenida y les explicaremos nuestra forma particular de trabajar la tierra de forma ecológica y biodinámica, mientras hacemos un recorrido en medio de las viñedos.

A continuación, entraremos en la bodega para descubrir aspectos importantes en la elaboración del vino. En primer lugar nos detendremos en la sala de tinas para probar tres vinos jóvenes que se encuentran en fase primaria de elaboración. Uno de estos vinos, además, tiene la particularidad de que es vinificado en una ánfora de piedra, un sistema innovador y prácticamente único en toda Cataluña, por lo que, se trata de una experiencia muy singular.

Después, ya en la sala de sala de crianza, probaremos los mismos vinos que habíamos degustado en la sala de tinas, pero en un estado de entre 7 y 8 meses más avanzados y en pleno proceso de envejecimiento en barricas. Aquí compararemos la pureza de dos variedades locales como la Mandó y la Sumoll, criados en ánforas de barro, con dos variedades foráneas: la Merlot y la Cabernet.

Y después de este viaje por la vida de un vino Collbaix, ¿qué mejor que probarlos embotellados? Las catas irán acompañadas de productos gastronómicos de proximidad.

¡Una visita única!